Muere Raúl Peña, escritor y director de cuatro largometrajes

El director Raúl Peña. Foto: Academia de Cine. 

Toda la vida trabajando y su fallecimiento pasa muy desapercibido. Sólo unos pocos medios han recogido la noticia del fallecimiento del director y guionista Raúl Peña, esencial e indiscutible nombre de nuestra cinematografía. Huérfano de padre y de madre taquillera de cine, comenzó en el cine al lado de su familiar Julián Reyzabal. Estudió el grado oficial en la Escuela de Cine y tuvo de compañeros a grandes como Manuel Gutiérrez Aragón o Víctor Erice. 

De sus primeros trabajos, destaca la escritura del guion de Zampo y yo, la cinta con la que debutó Ana Belén, de adolescente, que interpretaba a una niña de bien perseguida por un turbio payaso interpretado por Fernando Rey. Como director ha realizado cuatro películas: Los amores difíciles (1967), dividida en tres episodios y protagonizada por Nuria Torray (también contó con una principiante aspirante a actriz: Verónica Forqué). Le siguieron los títulos Prana (1970), Fray Dolar (1970) y Todos me llaman gato, diez años después. De nuevo con la Forqué, esta vez como principal, el madrileño se adentraba en el cine quinquí, género en el que destacó su coetáneo Eloy de la Iglesia. Retirado del cine, dueño de una productora dedicada a los anuncios publicitarios, se centró en su carrera como escritor, publicando en la editorial Renacimiento varios monográficos de viajes egipcios y árabes.